En la última sesión del Concejo Deliberante la delgada línea que unía al bloque justicialista con el Intendente Cantín se terminó de romper. Si bien se trata de una situación que tiene al menos un año de antigüedad, ayer parece haber explotado. Desde el Legislativo han recibido en reiteradas ocasiones los proyectos de ordenanzas aprobados con vetos totales de la Intendencia. Ayer dos de ellos eran de autoría de la concejal Rosana Larcher, quien fue la primera en criticar a Cantín. Uno de ellos se trataba del registro de empleo en la ciudad capital, que fue vetado en forma total por el ejecutivo. El segundo de ellos, también de su autoría, creaba el sistema denominado “Sabio Control” en las intersecciones de las calles Felipe Boero y Avenida Ricardo Balbín. El último –y quizás el más discutido- era del bloque justicialista y expresaba lo siguiente: “proyecto de ordenanza modificando el artículo N° 252 de la Ordenanza N° 2418, sobre Exención de Impuestos Municipales por Discapacidad”. De todas maneras como se remarcó en las primeras líneas, no se trata de tres proyectos vetados, ya que la situación viene al menos desde al año pasado. Desde los grupos de trabajo de los concejales expresaron que se tira abajo los trabajos que realizan con los vecinos, ya que nunca se terminan de concretar y que eso, es responsabilidad de la Intendencia.
Ahora Cantín se defiende culpando a la gestión anterior de Héctor Roquel, mientras desde el Legislativo se habla de un posible Juicio Político a su figura.