...su balance de lo realizado por el año está demostrado en el otorgamiento del premio "RAUL SEGOVIA", siendo éste un reconocimiento de la ciudad al trabajo constante, profesionalismo, preocupación, voluntad y sacrificio de los periodistas del staff de TN RIO GALLEGOS, notables merecedores de la distinción.
Respecto a los deseos para el 2015 siguen siendo los mismos que cuando se empezó este proyecto hace poco menos de un año, y es de trabajar con seriedad, responsabilidad y honestidad que los lectores del diario lo exigen y toda la población a quien va dirigido sin duda lo requiere.
Una de nuestras tareas, es escuchar los deseos de la gente, de los ciudadanos, y cuando los escuchamos podemos observar que todos tienen un lugar común, y ese lugar común es la paz, la tranquilidad, la no agresión, en fin, valores importantísimos para una ciudad que desea crecer, para una sociedad que debe mejorarse y adaptarse continuamente a los cambios producidos por los adelantos en la ciencia, en la tecnología y en el devenir de la historia social, económica, política, familiar y religiosa de este mundo globalizado.
Desde este editorial, deseo igualmente que cada uno de los habitantes de la provincia de Santa Cruz pueda hacer realidad sus deseos, pero tengo la obligación de decirles que si aquellos que piden esos deseos, se quedan solamente en ellos y no hacen ni quieren cambiar algo para realizarlos, la verdad que no sirven ni siquiera como deseos.
Si quiero más honestidad, tengo que empezar por mi, por ser más honesto y demostrar que sí lo soy, pero no para contestar a aquellos que agravian gratuitamente, sino para que mi conciencia me permita terminar un día de trabajo, acostarme, pensar en mi familia y dormir tranquilamente.
Si mi deseo para el 2015 es, poder pagar todas mis deudas, deberé ocuparme responsablemente de ello, deberé realizar actividades lucrativas extras en forma legal, ahorrar más dinero, no despilfarrar como lo hice en el 2014 y comenzar a borrar las actividades que me significaron gastos superfluos. De esa manera, seguramente se van a cumplir mis deseos.
Por último, si mi deseo es tener una buena salud, debo necesariamente no pedirle a Papá Noel la ausencia de enfermedades, sino comenzar en forma inmediata una vida sana, una vida sin adicciones, sin alcohol, sin drogas permitidas o no, y sobre todo; sin odios.
Ojalá que para el año entrante se puedan cumplir todos los deseos de ustedes, mis queridos lectores, pero ojalá también se pongan a trabajar para poder lograrlos, que se preocupen y ocupen constantemente para mejorar su calidad de vida, para convertirse en los buenos y correctos ciudadanos que son necesarios para una sociedad sana y feliz.
Entre todos, juntos, podemos sin duda construir una ciudad mejor.
Felicidades para todos y para cada uno de ustedes, deseando hacerle llegar un imaginario apretón de manos en las próximas fiestas.