Martín Paiva, candidato a intendente de Río Gallegos por el Partido Justicialista, propuso crear dentro de la estructura municipal dos unidades de control autónomas dirigidas por la oposición. “La idea –explicó- es transformar la intendencia apuntando a su fortalecimiento institucional. Con esta medida contribuiremos a recuperar la confianza y la credibilidad política que el municipio ha perdido”.

La iniciativa consiste en crear dos organismos autónomos que estarán dirigidos por la oposición política con acuerdo del Concejo Deliberante.
Junto al presidente, que será un profesional vinculado al área que deberá controlar, habrá dos vocales: uno en representación del gremio municipal y otro designado por el Poder Ejecutivo.
La primera unidad tendrá como misión fiscalizar proyectos y contratos. “Buscaremos garantizar que en cada obra se pague lo que corresponda y que no haya errores ni sobreprecios”, aclaró Paiva.
La segunda unidad hará las veces de auditoría de la ejecución de las obras públicas. “Aquí –apuntó- se controlará que todo se realice de acuerdo a lo pautado en el contrato correspondiente”.
“Estos controles serán diseñados fundamentalmente para el área de obras públicas, donde se mueve un gran volumen de dinero y están los mayores riesgos de caer en casos de corrupción. La nueva intendencia no volverá a pagar diez, cinco o dos por lo que vale uno”, resaltó.
“Anunciamos así una medida concreta en el marco de una política basada en la idea de discrecionalidad cero y transparencia ciento por ciento que queremos imponer. Este será el gran objetivo de la nueva gestión, para que el vecino vuelva a contribuir con su municipio y logremos así revertir la compleja situación actual”, sentenció Martín Paiva.



Viernes, 25 de septiembre de 2015