Un joven llamado Fabio Romero vive hace dos semanas en un automóvil estacionado en una de las calles del barrio Andino. Dentro del vehículo lo acompaña su esposa mientras que su pequeña hija vive con su abuela. Romero, que cumplía labores en la Cooperativa Magui Mar, se quedó sin trabajo hace un par de meses y ahora pide que le faciliten dos pasajes para irse de la provincia, a pesar de ser fueguino.

La crisis habitacional y la falta de oportunidades laborales que son moneda corriente en estas épocas parecen seguir calando hondo en parte de la sociedad fueguina que sufre las consecuencias de la desidia.

Tal es el caso de Fabio Romero, un joven ‘nacido y criado’ en Ushuaia que desde hace dos semanas vive junto a su esposa dentro de un vehículo estacionado en una calle del barrio Andino, porque ambos debieron abandonar la casa que alquilaban.

En declaraciones a Radio Nacional Ushuaia, Romero contó que “estoy viviendo en un vehículo hace dos semanas. No tengo plata para alquilar nada, trato de hacer lo que puedo para bañarme, comer pero más de eso no puedo hacer”.

“Yo quiero irme de la provincia. Soy nacido acá pero nadie me da bola, nadie me da una mano. Yo trabajaba en la Cooperativa Magui Mar, tres meses trabajé ahí y me tuve que ir de ese trabajo”, contó respecto a sus más recientes antecedentes laborales.

Además, precisó que “estaba alquilando y como nos quedamos sin plata, mi mujer y yo decidimos vivir adentro del auto, que es lo único que nos quedó” al tiempo que develó: “Yo estoy así hace 15 días. Los primeros cinco días estuve solo y después vino mi mujer, que decidió quedarse acá conmigo”.

“Yo trabajaba en la Cooperativa Magui Mar. No tenía luz en la garita donde trabajaba porque era sereno, no cumplían con muchas cosas y como no eran las mejoras condiciones laborales, decidí irme, aparte que ellos ya me habían dicho que iban a prescindir de mi puesto”, relató el joven.

Por otra parte, contó que “mi mamá tiene vivienda, ella vive en el barrio y nos está cuidando a la nena. Por suerte mi hija se pudo quedar con ella porque si no, no sé cómo terminaríamos” al tiempo que agregó: “Estamos los dos en el auto, estamos pasando frío y nos arreglamos como podemos”.

Sobre una posible ayuda de parte de los organismos oficiales, el damnificado aseguró que “hable con funcionarios de Desarrollo Social dela Municipalidad, solo por teléfono, pero por acá no vino nadie”.

“No tengo asistencia social ni de la Municipalidad ni del Gobierno. Cuando hablé con funcionarios municipales les pedí que me ayuden a conseguir un empleo o que me den dos pasajes para irme de la provincia”, remarcó. (Tiempo Fueguino)

Sábado, 12 de julio de 2014