Un grupo de familias que desde hace pocos años se asentaron en lotes fiscales a la vera de la Ruta Provincial N° 12, impidieron ayer que trabajadores de la construcción iniciaran las obras de 18 viviendas enmarcadas en el grupo de las 150 que ser ejecutan a través del plan Techo Digno financiadas por el gobierno nacional.

El problema se centralizó en la disputa por la potestad de una manzana ubicada en proximidades del autódromo Harry Regensburger donde las familias de referencia habían iniciado la construcción de una sede vecinal y la gestión de Córdoba reservó para el plan habitacional.
Los manifestantes llegaron a retirar los postes que se habían colocado para el tendido del cerco perimetral, lo cual suscitó momentos de tensión con los trabajadores afiliados a la UOCRA, que a su vez quemaron cubiertas en defensa de su fuente de trabajo.
En el sitio de la disputa se encontraba el director de Obras Públicas de la comuna, Walter Páez, quien dijo desconocer la existencia de directivas de la justicia para detener las obras, según el relato de la gente que ocupó lotes en las inmediaciones.
Afortunadamente, la situación se calmó con la llegada de una comisión policial de la seccional Segunda que actuó de oficio dado que debido a la feria judicial de invierno, no hay intervención desde ámbito por este tipo de casos.
Los vecinos argumentan que toda el área corresponde a zona de chacras, pero la actual gestión municipal argumenta que la misma se destinó hace dos décadas para la Zona Franca, pero como ese emprendimiento fue frenado en su momento durante la presidencia de Carlos Menen, los lotes quedaron a disposición de la comuna.
En medio de este confuso panorama, los ocupantes aseguran que el ex intendente Fernando Cotillo les entregó las tierras para que realizaran emprendimientos productivos, pero que no pudieron concretarlos porque no tenían los servicios de agua y energía, algo que recién pudieron lograr hace pocos meses.
El actual jefe comunal, José Córdoba no solo cuestiona la legalidad del otorgamiento de esas tierras sino que además denunció que algunos individuos se apoderaron de varios lotes con fines especulativos.
En tal sentido citó a Carlos Cuadros, calificándolo de “delincuente” y “policía exonerado”, asegurando que llegó a vender un terreno por un valor de casi 100 mil pesos.
El intendente también expresó el deseo de que la justicia falle a favor del municipio en torno a la potestad de los lotes fiscales, particularmente el de la manzana en cuestión, pero que también tenga en cuenta que quienes frenan la construcción de viviendas también atentan contra el trabajo de numerosos obreros. (La vanguardia del sur)

Viernes, 25 de julio de 2014