Pero no es raro que el teléfono pueda llegar a caerse en el inodoro o en la pileta. La posible solución es de lo más simple.

Si bien cada vez son más los teléfonos que son resistentes al agua, la mayoría de los que están actualmente dando vueltas por la calle si se mojan dejarán de funcionar en unos pocos segundos. Sea como sea, si bien no todos lo saben, hay algunas acciones que se pueden realizar con el teléfono para poder "secarlo" y permitir que siga funcionando.

Estos son los pasos a seguir si un teléfono se cae a la pileta, al inodoro o, de alguna manera, termina empapado.

No prenderlo si está apagado y apagarlo lo más rápido posible si está prendido para que no se produzca un cortocircuito.

Desarmarlo. Sacarle la batería (si se puede), la tarjeta de memoria, el chip y cualquier componente externo que posea y abrir todas las ranuras que tenga.

Secarlo lo máximo posible con cualquier trapo que absorva lo mayor posible el agua.
El verdadero truco secreto es el que sigue a continuación: arroz. El arroz es un cereal sorprendentemente absorbente y, por ese motivo, lo que hay que hacer es introducir el teléfono en una bolsa llena de arroz y dejarlo hasta dos días. Sea como sea, no tratar de prenderlo antes de las 24h porque, si todavía está mojado, puede generar un corto.

Viernes, 5 de septiembre de 2014