En la mañana de este viernes se rompió el caño de impulsión del agua ya potabilizada que abastece a las cisternas repartidas en la planta urbana. Una inmensa laguna de agua surgiente se detectó a unos 200 metros de la planta de tratamiento e impulsión.
Tras algunas horas de excavación se llegó al caño, comprobando la magnitud de la rotura. Para su arreglo vino personal de Río Gallegos, trayendo los materiales para la soldadura, que consiste en “vendar” el caño y aplicarle una resina que endurece luego de unas horas, adquiriendo la resistencia similar al del caño.
Mediante un comunicado, la empresa informó que concluyó con las tareas de reparación en el caño de la salida de la Planta Potabilizadora de El Calafate. Resta el proceso de secado de la soldadura que demanda entre 8 y 10 horas. Estiman que en la madrugada del sábado comenzará a restablecerse el servicio. Agradece a la población por la colaboración en el uso racional del agua durante estas horas.