Desde hace un tiempo, la veterinaria húngara reside en la ciudad de Punta Arenas -Chile- y trabaja para el Monumento Natural de Los Pinguinos magallánicos.
Este último 18 de febrero asistió a una nueva edición de la Fiesta Nacional del Lago, en la villa turística, en donde le sustrajeron su celular y su billetera..
Si bien, Lilla logró recuperar su documentación personal, no corrió con la misma suerte para hacerse nuevamente de su aparato de telefonía celular, que casualmente había pertenecido a su madre, que falleció apenas dos meses atrás.
La joven veterinaria, ofrece recompensa para que se concrete la devolución del celular, ya que en su memoria se encuentran guardadas las últimas fotos de su madre. (Señal Calafate)