El director del Hospital, Darío López, planteó los contratiempos sufridos en cuanto a lo económico y al recurso humano, dejando en claro que el ministro de Salud, Roberto Ortiz, tiene la voluntad de revertir la situación. En la otra vereda, la delegada de ATE, Carolina Ruiz, reafirmó los motivos del nuevo paro por 72 horas que comenzó ayer.

López aseguró que, tanto el recurso económico como el humano son dos tópicos que preocupan a la conducción del hospital. Para suplir las falencias en torno a la falta de personal, informó que ya está trabajando en el nosocomio el doctor Federico Larcade, especialista en Urología proveniente desde el Hospital Regional de Río Gallegos.
El urólogo prestará sus servicios una vez al mes con la autorización del director del Regional, pudiendo continuar con los casos que atendió en su primera visita, a comienzos de septiembre. Su tarea, además de las consultas, contemplará la intervención quirúrgica de los pacientes que necesiten de una operación, algo que nunca había ocurrido con esta especialidad en Río Turbio.
El ministro de Salud de la Provincia, Roberto Ortiz, se acercó a la localidad a dialogar con los responsables de la institución y a ratificarlos en su cargo. “Estamos muy entusiasmados con su llegada al gabinete provincial. Notamos una actitud positiva, vemos que tiene ganas de hacer cosas nuevas y de ir hacia adelante. Por ejemplo, al día siguiente de su asunción, se reunió con los directores de todos los hospitales. Cuando vino aquí, le planteamos nuestras necesidades; él ya conocía nuestra problemática. Le pedimos encarecidamente que, cuando venga un profesional, no se pierda tiempo para conseguir la documentación correspondiente”, afirmó el director.
Con respecto al costado económico, el cirujano confesó que los dos establecimientos de salud de la Cuenca se encuentran en una situación delicada, sin soluciones definitivas ni a largo plazo. “Tenemos profesionales para venir, lo que precisamos es que se agilice el proceso de documentación. Contamos con el apoyo del ministro y de su secretario”, describió.
Por su parte, Ruiz manifestó que se ha estado trabajando desde el sindicato para encarar la medida de fuerza de 72 horas, iniciada ayer y extendida hasta el día jueves, inclusive. “El problema no es el arancelamiento, sino los sueldos que tenemos los compañeros de la salud. Un trabajador de la ex 591 tiene un sueldo de $7000 de bolsillo. Este inconveniente se registra en todos los hospitales de la provincia, por eso salimos a la lucha. Necesitamos ser reivindicados en nuestros salarios”, remarcó y agregó que se está “acentuando la desidia del Ejecutivo para con los trabajadores de la salud”, lo que derivó en un nuevo paro. (Patagonia nexo)

Miércoles, 24 de septiembre de 2014