Darío Velázquez fue atacado en su habitación. Le asestaron un disparo en la frente. El joven murió en el Hospital Regional donde había sido trasladado por un vecino. “Lo mataron durmiendo”, coincidían sus conocidos ayer, en el pasaje 521 y Los Duraznos del barrio San Martín, donde residía. El asesino sabía cómo ingresar a la habitación.

Darío Velázquez, alias “El Curru”, de 27 años, fue atacado ayer sobre las 14:30. Lo asesinaron de un disparo en la cabeza mientras dormía en una pequeña habitación de una casa precaria del pasaje 521, entre Los Duraznos al 700 y Andrés Minoli, del barrio San Martín.
El joven fue trasladado por un vecino hacia el Hospital Regional de manera particular con un tiro en la frente con orificio de entrada pero sin salida, donde finalmente falleció.
Es el vigésimo tercer homicidio ocurrido este año en Comodoro Rivadavia.
Ayer Diario Patagónico entrevistó a sus conocidos en el pasaje donde vivía “El Curru”. Una de las allegadas a la familia dijo que el joven “ya andaba más tranquilo”. Según una fuente policial, tenía antecedentes por abuso de armas y algunos efectivos policiales lo conocieron por las juntas que había tenido a fines de 2010 con “Los Cara Flaca” en lo alto del San Martín.
Según un tío, hace poco Velázquez se había quedado sin trabajo en una empresa constructora y vivía solo en una habitación contigua a la propiedad de su padre. “Al pibito lo mataron durmiendo”, señaló uno de los jóvenes que salía del pasaje y expresó “acá andan sicarios” pero no dieron más detalles.
Los pasillos hablaban bajo el silencio de la tarde. La familia adentro de la casa, algunos amigos con la cabeza gacha. Otros dos amigos prestando declaración en la comisaría frente a los representantes del Ministerio Público Fiscal junto a otros familiares del joven.
Según las fuentes consultadas, la policía entrevistó a dos amigos de “El Curru” luego de que se recuperaran del estado en el que se encontraban producto de la ingesta alcohólica. Estos habrían señalado que luego del ataque del que no se habrían percatado salió corriendo un joven que subió a un automóvil y escapó.
Al cierre de esta edición los investigadores seguían tomando entrevistas a allegados de la víctima y amigos con el fin de obtener mayores detalles del asesino. Lo concreto es que el autor del homicidio pasó casi desapercibido en un lugar, semi-escondido por la naturalidad del pasaje, entre cercos de chapas de tambor y otras construcciones.
Una de las allegadas a la víctima dijo que el joven fue sorprendido en su cama. Señaló que estaba solo y que el asesino escapó. Para la policía el homicida sabía cómo entrar y salir de la habitación de Velázquez por lo que indagan en su círculo más cercano.
Incluso el jefe policial de la Seccional Séptima, Fernando Mora informó que el padre de la víctima que vive en la casa lindante, escuchó un ruido pero no se percató del homicidio en el momento. Ahora los investigadores trabajan para poder establecer qué tipo de amistades frecuentaban la habitación de Velázquez y si este tenía diferencias con alguien que le quisiese quitar la vida por alguna razón.
El pasillo de Los Duraznos al 700 en el que se pueden apreciar pintadas con los colores del club Jorge Newbery ayer por la tarde estaba vacío. Algunos jóvenes que pasaban con gorritos azul y blanco acompañaban a la familia que no quiso hablar ante el dolor que los invadía. (El patagónico)

Lunes, 13 de octubre de 2014