PREOCUPACIÓN MEDIOAMBIENTAL
Alcaldesa chilena quiere explicaciones por la Megausina en Río Turbio
La central comenzará con las primeras pruebas de funcionamiento en diciembre próximo. Tendrá una capacidad de generación de 240 megavatios y una provisión garantizada de carbón de 1,2 millones de toneladas por año.
El impacto ambiental que podría ocasionar la termoeléctrica en Torres del Payne es materia de análisis para las autoridades de gobierno índico la Alcaldesa Anahí Cárdenas.
Al ser entrevistada por Radio Magallanes, sobre el impacto que podría ocasionar la termoeléctrica de Río Turbio, a su cercanía con la octava maravilla del mundo, la alcaldesa sostuvo que si bien se ha conversado muy a la ligera sobre la magnitud e impacto debe ser conversado a nivel de cancillería y en los próximos días espera reunirse con el Intendente Jorge Flies para analizar la situación.
Concluyo indicando la Alcaldesa Anahí Cárdenas, que “Las autoridades deben referirse saber cuál sería el impacto que causara la termoeléctrica en la comuna de torres del Payne.
La localidad de Río Turbio se encuentra en la frontera con Chile y a pocos kilómetros del océano Pacífico. La central tendrá capacidad para inyectar 240 megavatios a la red nacional eléctrica, lo cual alcanza para cubrir la demanda de energía de una población de alrededor de 600 mil habitantes. En 2013, el consumo eléctrico de Argentina alcanzó los 24 mil megavatios.
La tecnología de la central se encuentra entre las más desarrolladas del mundo en materia de producción eléctrica a partir de carbón, un recurso que genera el 40 por ciento de la energía en el mundo. La particularidad de la usina de Río Turbio es que utiliza un sistema de calderas adaptadas para quemar el carbón en estado puro (directo de la mina), cuando la mayoría de estos establecimientos trabajan con el mineral purificado (refinado y lavado), lo cual produce fuerte contaminación de los ríos. En el Ministerio de Planificación Argentino, se tomó la decisión de emplear esta técnica de producción limpia, con el criterio de garantizar la sustentabilidad medioambiental de la zona. Alemania, Polonia, España y Chile son los únicos cuatro países del mundo que operan con esta clase de centrales. Otro punto importante es que el desecho de la termoeléctrica será una ceniza en forma de yeso, lo que puede comercializarse para la industria de la construcción. (Fuente: Radio Magallanes)
Sábado, 1 de noviembre de 2014
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