Las paritarias salariales para los trabajadores de la Unión Tranviario Automotor (UTA) se encuentran en un cuarto intermedio, señaló Rubén Aguilera, secretario general adjunto de Santa Cruz.
El dirigente gremial sostuvo que el gremio se encuentra en estado de alerta debido a que las sumas otorgadas a inicio de año se abonarán por última vez, por lo que es necesario arribar a un acuerdo salarial.
Aguilera expresó que la UTA demanda a las Cámaras Empresarias un “incremento del 35% en los haberes de los choferes de corta, media y larga distancia”.
Sobre el acuerdo cerrado a inicios de año, tras un largo conflicto con el empresariado en el que debió intervenir el Estado Nacional para llegar a una solución, ante el distanciamiento de las partes en la negociación, Aguilera recordó que se trató de una suma puente, correspondiendo 1.400 pesos para los choferes de corta y media distancia y 1.200 pesos para los de larga distancia.
El secretario general adjunto expresó que “en caso de no llegar a un acuerdo en las próximas audiencias se negociará para extender el pago de las sumas que venimos percibiendo, hasta que lleguemos a un acuerdo salarial”, subrayó.
A inicios de año, el gremio había protestado contra los altos niveles inflacionarios que se registraron en el país, y pedía a las empresas de transporte que las recomposiciones salariales se otorgaran de acuerdo al ritmo de la inflación.

Zona norte
En otro tramo de la entrevista, Rubén Aguilera manifestó su preocupación sobre el conflicto que se ha suscitado semanas atrás con una empresa de transporte de pasajeros, La Unión Cooperativa, que presentó la quiebra.
El dirigente de la Unión Tranviario Automotor expresó que “hay un fuerte acompañamiento de toda la Comisión Directiva de este gremio a los trabajadores, está difícil la situación porque la empresa no abonó los salarios, viáticos, ni los incrementos que se otorgaron”, expresó.
Aguilera señaló que mantuvieron una reunión con las autoridades de la Secretaría de Estado de Trabajo y Seguridad Social a fin de solicitar que “acerquen a las partes, hay 38 familias que dependen de ese transporte, los servicios se cubren, pero la gente queda en la calle”, dijo Aguilera.