Los tres partidos más importantes de la fecha hoy se jugaban a la misma hora, a las 17:30, por lo que por la tarde se pudo observar un centro riogalleguense casi desierto durante 90 minutos, panorama que cambió radicalmente tras el pitazo final de Silvio Trucco, quien dirigió en el Monumental River-Quilmes. Es así, que River gritó campeón, y ya para ese momento poco importó lo que pasó en La Plata y en Victoria con Estudiantes y Gimnasia.
Pasadas las 20:00 comenzaron a desfilar por las calles de la ciudad cientos de vecinos con banderas, camisetas, caravanas, bocinas, acompañados por cánticos alentando al equipo, y por supuesto, las clásicas cargadas al eterno rival.
Los hinchas millonarios de Río Gallegos se reunieron en Kirchner y San Martín para festejar el gran triunfo millonario que cortó una larga racha sin levantar una copa.