COLUMNA EDITORIAL
BIOGRAFIA NO AUTORIZADA
Hola amigos, no es por decepcionarlos, sino que hoy me voy a dedicar a una personalidad de la que no puedo decir nada malo, no porque no lo sepa, sino porque creo que no tiene muchas cosas negativas para destacar sino todo lo contrario. Se trata de un precandidato al cual lo están seduciendo para que…
…se presente en las próximas elecciones, desconociéndose si lo hará o no. Se trata del señor Pirincho Roquel. En la memoria de muchos riogalleguenses aparece el actual diputado Roquel como un funcionario ordenado, que siempre ha cumplido, a veces en forma eficiente y otras veces no, con las obligaciones que su cargo le impuso. Dos gestiones al frente de la municipalidad de esta ciudad y su trabajo de incansable militancia, le permitieron convertirse en un importante referente de la Unión Cívica Radical, cuya voz en respetada en su partido, sus opiniones compartidas por muchos y sus acciones seguidas por una militancia responsable. Recién termino de repasar lo escrito desde el principio, y me parece que no está de acuerdo con muchas editoriales donde se critica, se trata de encontrar lo malo, se busca crear una imagen negativa de algún funcionario, y las palabras anteriores dan cuenta que no tiene que ser siempre tan así. Bueno, pero tampoco se trata de un funcionario de excelencia sino que como dije antes, ordenado, cauto, a veces hasta lento para las decisiones y para dar una opinión política relevante. Podemos hablar lo que algunos nos acordamos, como fue la remodelación de la céntrica Plaza San Martín, donde se emplearon más de 15 meses para finalizarla, toda vez que se realizó por administración municipal y con su mano de obra, pero no podemos dejar pasar la cantidad de obras que observamos durante su gestión, que aunque fueran realizadas con fondos provenientes de la Presidencia de la Nación, todos los riogalleguenses disfrutamos y lo seguimos haciendo. En fin, muchas más cosas buenas que malas, toda vez que su bondad, gestos de hombre de bien y sus actitudes de la vida diaria demuestran que podría convertirse en un buen y perfecto candidato para las próximas elecciones. ¿O no? No. Definitivamente no. O por lo menos, no, para los cargos ejecutivos o legislativos de nuestra ciudad, por dos razones fundamentales. La primera razón es lo que dijimos, ya posee como antecedente haber ocupado el principal sillón de la Intendencia de Rio Gallegos por dos períodos, y un tercero no es nunca bienvenido, máxime teniendo en cuenta que la ciudad no es la misma, ha sufrido cambios en estos últimos años, de los cuales por supuesto trataremos en próximas editoriales, y ello significaría un retroceso, un volver para atrás que no se acepta esto en forma lógica. Pero la segunda razón, y la más importante, se trata de seguir defendiendo aquellos que muchos llaman el “recambio generacional”. Necesitamos gente nueva, gente joven, gente con experiencia con ganas y fuerzas para ponerse al frente de los cambios necesarios, por lo que se precisa que los “viejos” hagan un paso al costado, que ellos no se vayan a sus casas sino que se queden, desde algún lugar que no le exiga un gran desgaste como puede ser un ejecutivo municipal. Aquí sí, que es desde ese lugar que tienen la obligación de apoyar a los jóvenes candidatos, no dejarlos solos, seguir apoyándolos para que con la experiencia de sus mayores puedan optimizar su rendimiento. Me queda por último considerar que lo dicho cuenta no sólo para el diputado Roquel, sino también para todos aquellos llamados dinosaurios, delfines o momias que intentan enquistarse en un gobierno, que siguen pegados a sus sillas a pesar que físicamente no puedan estar más de una hora en una misma posición, o que no estén en condiciones para trabajar 10, 11 o 12 horas seguidas en bien de la comunidad, como lo deben hacer. Bueno, amigos, llegó nuevamente el momento de despedirnos hasta el siguiente editorial, donde continuaremos con estas biografías. Hasta otra oportunidad.
Viernes, 10 de abril de 2015
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