A la figura mariana le falta la cabeza y la gruta sufri roturas en los vidrios, aparentemente por el lanzamientos de piedras. A cinco meses de la entronizacin de una nueva imagen de la Virgen de Lujn en las Sierras Azules, Zonda, un lugar que tiene una fuerte impronta catlica pues all se concentran miles de jvenes para celebrar Pascuas cada ao, los fieles sufrieron otro golpe: la figura mariana de una de las grutas del cerro fue decapitada. El prroco Vctor Gallardo inform que la nueva agresin no slo afecta a los catlicos, sino a la comunidad zondina en general y que ahora evalan no colocar un nueva Virgen en forma permanente.
No sabemos quin ni cundo daaron la gruta y la imagen. Me avisaron el fin de semana pasado y sinceramente hubo un fuerte impacto en la comunidad. Esto hiere a todos, no se trata slo de una cuestin religiosa sino tambin cultural, porque hay vecinos, gente de Zonda que ama su tierra y le duele que venga alguien y rompa lo suyo, dijo Gallardo.
La gruta que sufri el acto vandlico es una de las que est en la formacin de 1.700 de altura, segn inform Gallardo, y fue levantada por los fieles.
A la imagen de la Virgen dentro de la estructura le falta la cabeza y la puerta tiene algunos vidrios rotos, aparentemente tras haber sido apedreada, pues dentro hay varias rocas pequeas.
Vamos a intentar ir al cerro en los prximos das y ver si la imagen puede ser restaurada o si es necesaria una nueva Virgen. Y entonces analizaremos si volvemos a llevarla a la montaa o la dejamos en la parroquia, para ser movilizada en Pascuas u alguna otra celebracin, dijo Gallardo. Hay un dolor tan grande entre los fieles que una persona, que tiene su casa y su vida en el pueblo, se ha ofrecido para levantar una pieza en la base del cerro y de esa manera por lo menos saber quin sube o baja. Sabemos que es algo complejo y que esas tierras tienen dueo, pero ejemplifica la sensacin que tenemos despus de este nuevo dao, agreg el prroco.
EN 2014
A fines del ao pasado, adems de entronizar una nueva imagen de la Virgen, los fieles repararon la gruta de la cima y aseguraron toda la estructura al piso utilizando cemento y arena. Para eso, los peregrinos tuvieron que subir dos veces, llevando los materiales y ayudndose con animales de carga.
La imagen de Nuestra Seora de Lujn que destruyeron en aquella ocasin haba sido entronizada en lo alto del cerro en 1950, por iniciativa y obra de un sanjuanino que quiso cumplir con una promesa. (Diario de Cuyo)