El propio intendente Roberto Giubetich dijo que la recolección de basura era una deficiencia, pero en esta esquina de Santa Fe y Pasaje Wilson, los desechos fecales con piedras sanitarias propias de los felinos domésticos, son la muestra clara de esta "deficiencia", de la que también hay responsabilidad del vecino que no respeta ni las mínimas normas de convivencia.

Si bien es una postal que sucede desde hace un tiempo, según acusaron vecinos a este medio digital, en la intersección de las calles Santa Fe y Pasaje Wilson del barrio Fátima, ambas esquinas están desparramadas con piedras sanitarias y materia fecal propias de los gatos, situación que es ajena a estos animales que justamente se caracterizan por ser lo más higiénicos y limpios de los animales domésticos.

Lo cierto es que, tanto desde el lado del municipio, que es el que lleva la mayor de estas responsabilidades, porque además de ser el encargado de la recolección de la basura, la limpieza urbana, entre otras cosas, es igual de responsable a la hora de controlar que estas situaciones no sucedan.
Pero también de este contexto no puede quedar de lado el propio vecino, quien no cuida, no respeta y al menos tener la consideración de respetar los mínimos códigos de convivencia urbana.
Ante esta situación, vecinos se quejaron y expresaron su malestar a nuestro medio porque consideran que el aumento de los impuestos con el "tarifazo" de las políticas implementadas por la nueva gestión y que deben pagar obligadamente, no los beneficia y esta postal de suciedad en plena calle, es su deber y obligación.






Miércoles, 13 de abril de 2016