El lunes por la mañana, integrantes de la delegación de Luz y Fuerza Cuenca Carbonífera protagonizaron un acto de vandalismo en el Monumento a los Bomberitos de Puerto Madryn, una estatua que recordaba a los 25 jóvenes, de entre 11 y 23 años, que murieron tras intentar apagar un incendio un 21 de enero de 1994. Según se supo, tres de los quince responsables fueron detenidos y ya fueron liberados en la jornada de ayer.
Esto ocurrió en el marco del torneo regional Eduardo Torino, en el que los representantes de nuestra comunidad obtuvieron la victoria en una de las disciplinas desarrolladas.
La Policía detuvo a los sujetos, quienes permanecieron en la Comisaria Primera de la ciudad portuaria hasta realizarse la audiencia de control de detención. El regreso a Río Turbio fue ayer por la mañana.
El hecho se produjo a las 8 de la mañana de este lunes, cuando, según relató una testigo, los hombres comenzaron a destrozar el monumento y corrieron. Gracias al aviso inmediato de una mujer se pudo lograr la detención de tres de los quince hombres en presunto estado de ebriedad.
Este hecho generó indignación y dolor en la comunidad de Puerto Madryn, ya que el monumento a los Bomberitos representaba lo que se vivió hace 20 años, cuando el 21 de enero, un gran incendio de pastizales a la vera de la Ruta Nº 3 termino con la vida de 25 jóvenes.
Repudio y disculpas
El secretario general de la seccional local, Marco Navarrete, manifestó su repudio sobre lo sucedido y comentó: “En ningún momento fue a propósito, sino que fue producto de un festejo por el logro de un campeonato. A la hora de irse al hotel, pasaron por la plaza y pasó todo lo que pasó. Fue un incidente que nunca tendría que haber ocurrido”.
El dirigente anunció que la seccional se hará cargo de los daños causados y que se evaluará la posibilidad de una sanción a los tres involucrados, luego de poder dialogar con ellos para conocer su versión.
Asimismo el dirigente de la regional de Luz y Fuerza, Adriano Villagra, repudió lo sucedido, y envió las disculpas del sindicato a la comunidad de Puerto Madryn. Afirmó que el gremio enmendará el daño causado por los afiliados. Se transmitirá la voluntad de reparación, desagravio y perdón del caso al pueblo, a través del intendente y Concejo Deliberante de esa ciudad.
Por su parte, Segura, padre de uno de los tres detenidos, expresó en el programa de Franco Paz, Un Grito en el Cielo, que “mi hijo no tuvo nada que ver con lo que pasó”. “Él, junto con los otros dos chicos, iban camino al hotel a buscar sus bolsos, cuando se dieron cuenta de lo que ocurrió. Me dijo que nadie fue a romper nada, sino que un grupo de compañeros se quiso sacar fotos y se subió al busto, terminando por romperlo. Como no tuvo nada que ver, quiso tomar un remis, y ahí fue cuando la policía empezó a llegar. Le preguntaron de dónde era y después, lo detuvieron”, relató.
“Todos saben que mi hijo es un chico muy responsable. No estaba en el lugar cuando pasó todo, al igual que los otros dos. Además, les hicieron un análisis y resultó que no tenían alcohol en sangre. Es doloroso, porque lo tildaron de delincuente antes de saber qué pasó. Fue un error de un compañero, no tengo por qué juzgar a nadie. Lamentablemente, se apoyó en el busto y se cayó. Nadie fue a destrozar nada”, subrayó.
Segura reveló que trataron muy bien a su hijo en la comisaría; de hecho, cuando se pudo comunicar, confesó: “Uno de los agentes me dijo: ‘Ni pinta de delincuente tiene (sic), quédese tranquilo’”. Aparentemente, hay documentos fotográficos que confirman que el joven no estuvo cuando se derrumbó el busto.
Este episodio dará mucho por hablar, ya que en estos días se podría conocer fehacientemente cómo se produjeron los hechos, que han despertado el malestar de los familiares de los bomberitos fallecidos, a pocos meses de cumplirse 21 años de la tragedia. (Patagonia Nexo)